Por una mayor vinculación entre la ciencia y la sociedad: VIII Congreso de Indicadores de Ciencia y Tecnología

 

Uno de los principales desafíos de la medición de las actividades de ciencia, tecnología e innovación es dar cuenta —de manera cuantitativa— del complejo fenómeno que implica el impacto que las actividades mencionadas generan a nivel social. Con esa problemática en primer plano, entre el 5 y el 6 de octubre tuvo lugar en Madrid, España, el VIII Congreso Iberoamericano de Indicadores de Ciencia y Tecnología.

La organización del VIII Congreso corrió por cuenta de la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT), el Observatorio Iberoamericano de la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad del Centro de Altos Estudios Universitarios de la Organización de Estados Iberoamericanos (CAEU-OEI) y el Instituto de Estudios Documentales sobre Ciencia y Tecnología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IEDCyT-CSIC). La sede del encuentro fue el Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CCHS), ubicado en la capital española.

Para descargar ponencias y presentaciones: congreso.ricyt.org

 

A su vez, la reunión tuvo el auspicio de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía, el Instituto de Estadísticas de la UNESCO (UIS-UNESCO), el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y la Red de Estudios Políticos, Económicos y Sociales de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación (Red CTI-CSIC).

 

Las palabras de apertura del VIII Congreso estuvieron a cargo de José Manuel Fernández de Labastida y del Olmo, director general de lnvestigación y Gestión del Plan Nacional de l+D+i del Ministerio de Ciencia e Innovación de España; Eduardo Manzano, director del CCHS; Luis Plaza, director del IEDCyT; Mario Albornoz, coordinador de la RICYT; Francisco Triguero, secretario general de Universidades, Investigación y Tecnología de la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía; y Alejandro Tiana, director del CAEU.

 
También participaron del encuentro distintos expertos de diversos organismos internacionales, entre ellos la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la CEPAL y EUROSTAT. Asistió, asimismo, gran parte de los delegados y técnicos de los organismos nacionales de ciencia y tecnología de América Latina y el Caribe, para quienes se organizó posteriormente un taller adicional (VER ABAJO).

En números totales, el encuentro albergó a unos 200 profesionales de toda la región iberoamericana.

  

La misión de la RICYT y los objetivos del VIII Congreso

 

Bajo el lema “Demandas sociales y nuevas tendencias en información científica y tecnológica”, el encuentro buscó ampliar el universo de discusión y participación en los temas más relevantes en materia de indicadores de ciencia, tecnología e innovación. En ese sentido, el VIII Congreso fue el escenario ideal para un rico intercambio de experiencias regionales que permitió resaltar la necesidad de reducir la brecha existente entre la ciencia, la tecnología y la sociedad. Más allá de que este abordaje estuvo presente a lo largo de todo el programa, se le otorgó una especial importancia en una mesa específica que se organizó sobre la temática, que también fue afrontada durante las conferencias magistrales de los reconocidos expertos Fred Gault y Giorgio Sirilli.

 

La puesta en funcionamiento del congreso se organizó en torno a cuatro grandes paneles temáticos, que permitieron un acercamiento interdisciplinario a algunos de los temas clave en la construcción de indicadores: “Indicadores de Innovación: nuevas demandas”, “Indicadores de Percepción Pública de la Ciencia”, “Equidad social, ciencia y tecnología: indicadores de impacto” y “Nuevas tendencias en indicadores de producción científica”.

 

También hubo espacio para presentar los avances en la actualización del Manual de Bogotá, una de las publicaciones fundamentales de la RICYT, y para inaugurar un debate sobre la movilidad internacional de científicos e ingenieros en Iberoamérica. Fueron presentados, además, los avances del Manual de Antigua y el Manual de Buenos Aires.

 

Durante todo el programa de la reunión, se aspiró a analizar los principales desafíos que plantea la utilización de la información provista por los indicadores, tanto para la formulación de políticas como para el debate público sobre la ciencia y la tecnología. Esto implica el análisis de los potenciales usos de los indicadores de ciencia, tecnología e innovación para el enriquecimiento de los estudios sociales y políticos en el ámbito iberoamericano.

   

La extensa trayectoria del Congreso de Indicadores

El VIII Congreso de Indicadores de Ciencia y Tecnología forma parte de una serie de encuentros que la RICYT viene ofreciendo desde hace más de 15 años. Sus antecedentes son los siguientes: I Taller de Indicadores de Ciencia y Tecnología (Buenos Aires, 1994), II Taller Iberoamericano de Indicadores de Ciencia y Tecnología (Cartagena de Indias, 1996), III Taller de Indicadores de Ciencia y Tecnología (Santiago de Chile, 1997), IV Taller de Indicadores de Ciencia y Tecnología (México D. F., 1999), V Taller de Indicadores de Ciencia y Tecnología (Montevideo, 2001), VI Taller de Indicadores de Ciencia y Tecnología (Buenos Aires, 2004) y VII Congreso de Indicadores de Ciencia y Tecnología (San Pablo, 2007).

Durante su discurso de clausura, el Prof. Mario Albornoz anunció que ya se están poniendo en marcha los preparativos para la próxima cita de la RICYT, que tendrá lugar en Bogotá, Colombia.
 

IV Taller de Armonización de Indicadores de Ciencia y Tecnología

 

El 7 de octubre, una vez finalizado el VIII Congreso Iberoamericano de Indicadores de Ciencia y Tecnología, se realizó el IV Taller de Armonización de Indicadores de Ciencia y Tecnología.

 
Se trató de un taller cerrado para los técnicos encargados de la construcción de indicadores en cada uno de los países de la región. Esta reunión se viene realizando en forma anual desde 2007, con un triple objetivo: alcanzar una mejor calidad en la medición a nivel iberoamericano, compartir experiencias en el trabajo con indicadores y estrechar vínculos entre los expertos de los distintos países.